La cercanía de la Semana Santa nos remite a un nuevo destino al cual poder hacer una escapada interesante y llena de actividades de todo tipo. Nos referimos a la ciudad de Zaragoza, donde se celebra una de las fiestas por Semana Santa más famosas de España. Son dignas de destacar las diferentes procesiones que congrega a una gran multitud de personas de todas partes, así como también se registra una amplia participación del público local. Si quieres realizar un viaje en Semana Santa, te recomendamos que incluyas en tu lista de destinos destacados.
En primer lugar, te comentamos que Zaragoza es la capital de la Comunidad Autónoma de Aragón, así como de la provincia que lleva el mismo nombre. En cuanto a su ubicación geográfica, se encuentra a orillas de los ríos Gállego, Huerva y Ebro, además del Canal Imperial de Aragón. Por estar en el centro de un valle, la belleza natural de esta ciudad es incomparable. Un dato importante, para los extranjeros principalmente, es que si viajan a Zaragoza estarán cerca de otros puntos de interés españoles, como ser la capital Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao y Toulouse.
Tan importante es la Semana Santa de Zaragoza que desde hace algunos años es considerada Fiesta Religiosa de Interés Nacional, teniendo también como protagonista a la música, de la mano del bombo y el tambor. Si nos remontamos a los orígenes de esta celebración, debemos viajar en el tiempo hasta el siglo XIII. En ese entonces nació la Hermandad de la Sangre de Cristo. Por otra parte, la Semana Santa se consolida con la forma que actualmente posee aproximadamente en el año 1936, después de la huelga de los terceroles, quienes eran los porteadores que se encargaban de llevar los pasos en la procesión del Santo Entierro, la cual se lleva a cabo el Viernes Santo; decidieron conformar una cofradía por ser fieles a la imagen de la Piedad y de este modo pueden procesionar con la Virgen de la Piedad. Después de esta fundación y de la del Santo Sepulcro, comenzó a ser más prolífica la creación de Cofradías y Hermandades, hasta llegar al día de hoy a ser unas cuantas.
Después del nacimiento de las diferentes cofradías, otro hecho que adquirió vital importancia para la caracterización de la Semana Santa de Zaragoza fue cuando, en los años cuarenta la la cofradía de las Siete Palabras y de San Juan evangelista, fundamentalmente creada por jóvenes, introdujeron los tambores y bombos para acompañar las procesiones. Esta idea fue importada del Bajo Aragón y fue a partir de allí que estos instrumentos son tan importantes como las propias procesiones para esta fiesta. La cuerda de tambores y bombos es una de los grandes atractivos que congrega a miles de turistas año a año y cada vez a más. Un aspecto que distingue a la Semana Santa de esta ciudad a otras de otras localidades es que las Cofradías suelen ser muy numerosas, superando incluso a los 350 integrantes por agrupación.
El estilo que poseen las cofradías zaragozanas es variado en lo que respecta a la vestimenta, más que nada con los colores distintivos utilizados, aunque casi todas cubren sus rostros con un tercerol, salvo las que se adaptaron a la forma andaluza con un capirote cubriendo la cabeza. Cabe mencionar que cofradías como La Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Señor Jesús de la Humildad y María Santísima del Dulce Nombre y la Cofradía de la Sagrada Institución de la Eucaristía tienen cuadrillas de costaleros quienes se encargan de trasladar los pasos, pero en general se ha implantado el utilizar ruedas como forma de traslado.
Las procesiones más importantes son la del Santo Entierro y la del Encuentro. La primera de ellas es la que da inicio a los cortejos procesionales en Zaragoza. De ella se encarga la Hermandad de la Sangre de Cristo, quienes comienzan el recorrido en la Iglesia de Santa Isabel de Portugal (San Cayetano), el Viernes Santo. En la actualidad se acostumbra a que las Cofradías que procesionan este día son 24, todas pertenecientes a la Junta Coordinadora de Cofradías de Zaragoza. La ceremonia culmina en el legendario Cristo de la Cama, imagen que nació en el período barroco y que perduró a lo largo de la historia.
Por otra parte, la Procesión del Encuentro es probablemente uno de los más multitudinarios, en el cual, precisamente se produce el encuentro entre las cofradías de Jesús Camino del Calvario y de San Joaquín y la Virgen de los Dolores. De este modo, las dos Cofradías se congregan en sus sedes correspondientes y se dirigen a un lugar predeterminado. En la actualidad, este lugar es la plaza del Pilar, recreando el instante en el cual la Virgen se encuentra con su Jesús en la calle de la Amargura. Tras compartir el toque del tambor, ambas cofradías se colocan una frente a la otra.
Básicamente esta sería una pequeña aproximación a la Semana Santa de Zaragoza, una de las más importantes de nuestro país y a la que recomendamos, conozcáis. Esperamos vuestros comentarios.