Hawái –en inglés Hawaii— es el mas reciente de los estados de los Estados Unidos, que se adhirió en el año 1959. Esta formado por un grupo de islas en el norte de la Polinesia, en el océano pacífico. Es un destino muy llamativo por sus paisajes naturales y por ser un escenario de paz y relax, con playas paradisíacas y un clima cálido estupendo para unas vacaciones. Pero tiene muchas otras curiosidades que puede que desconozcas.
La isla Big Island, la más grande del archipiélago, no deja de crecer. Dado su origen volcánico, la actividad de éste la hace crecer un poquito más cada día, llegando a crecer unas 17 hectáreas al año crece todos los días por un volcán activo. El volcán Kilauea, que lleva más de 30 años en erupción es el responsable de ello.
Por otro lado, el volcán Maunsa Loa es el más grande del mundo y también se encuentra en esta misma isla. Como dato, este escenario en que la lava fría convertida en roca volcánica forma el suelo ha sido utilizado por la NASA para entrenar a los astronautas por las similitudes de composición con la luna.
Las costas de Hawái son un paraíso para surfistas y demás amantes de los deportes acuáticos. En las costas del archipiélago, las olas pueden llegar a alcanzar los 9 metros de altitud, olas gigantescas, que la convierten en el mejor punto del mundo para practicar surf, si eres lo suficientemente atrevido para hacerlo.
Tiene una fauna marina de la que hay que mantenerse alejado. Existen más de 350 especies distintas de tiburones en Hawái, de las que solo 30 pueden llegar a ser peligrosas para los humanos. Aunque estos animales no suelen atacar a las personas, conviene evitar nadar o surfear de noche, al amanecer o al anochecer cuando los tiburones salen a cazar. Otro animal curioso es el pez piedra, esta considerado el pez más venenoso conocido. Puede llegar a medir hasta 20 metros y tiene aspecto de roca por lo que se puede pisar sin querer. Puede producir dolores pero no es mortal.
