Algunas personas suelen enfrentar diversos miedos, más aún cuando se enfrentan a un viaje. Uno de los miedos más comúnes es el que se tiene a volar, sobre todo cuando esto se realiza por primera vez. A veces, no eres tu que sufres de ese miedo, sino tu acompañante de viaje, un amigo o un familiar que vuele contigo.
Es por ello que en el día de hoy, desde PortalVacaciones os acercamos algunos consejos para tratar con eficiencia y calma este miedo y ayudar a vuestro amigo si padece de él. Cuando se presenta esta fobia, se dan en el cuerpo algunos síntomas como palpitaciones o ganas de salir corriendo del aeropuerto.
Siguiendo estas sugerencias, podrás prever situaciones y en caso de que suceda algún inconveniente de inseguridad, sabréis como adaptaros a las circunstancias. En primer lugar, intentad no obligar ni presionar a vuestro compañero, sino que la decisión debe nacer de su voluntad. La persona tiene que estar dispuesta a enfrentar su temor, nadie debe presionar a que esto pase.
Una de las estrategias aconsejables es procurar que la persona se distraiga, incluso desde la llegada al aeropuerto. Una charla amena que aleje de su mente el vuelo en sí que tendrá que enfrentar puede ser una buena solución, tratando de evitar que mire cómo despegan y llegan los aviones por la puerta de acceso. Contad chistes, o intentad hablar de temas agradables.
Después, una vez que estéis en el avión, sentaros a su lado y preferentemente dejad que se siente en el lugar más cerca del pasillo, así podrá sentir que tiene mayor libertad y no está tan herméticamente ajustado a un espacio más reducido. Esto le otorgará mayor seguridad en sí mismo, eso sí, su esa persona desea sentarse en otro lado, debéis respetarla.
Por otra parte, la distracción es un punto clave incluso en el avión, así que tenéis que estar atentos de proporcionar temas de charla. Puede ayudar el tocar cuestiones referidas al esparcimiento, como la música, los deportes, la familia, entre otros que vosotros sepáis que a vuestro acompañante es agradable.
También, tened en cuenta cerrar las cortinas de la ventanilla, para que no se vea qué tan alto estáis y no causar miedo a las alturas. Es mejor no ver, para no temer. Además, en caso de que vuestro amigo sufra algún ataque de ansiedad o cualquier tipo de síntoma por el temor, consultad al personal de vuelo, ellos están precisamente para ello, son las personas capacitadas para asesoraros y ayudaros con la situación.
Uno de los momentos más difíciles que tendréis que soportar es el del carreteo y despegue. Allí es crucial vuestra atención en el amigo que la necesita. Respirar profundamente ayuda también, y explicadle que los sacudones y movimientos son normales, que no son causa de alarma. Algo importante es prestar atención a todas las medidas de precaución que indican las azafatas, así tendréis seguridad vosotros y vuestro amigo.
Por último, si véis que se ha relajado y distendido y por ejemplo, quiere dormir, debéis dejarlo, estar continuamente pendiente también puede ser agobiante, así que dejad algunos momentos para que vuestro amigo se enfrente solo a su miedo, seguramente si necesita algo os hará saber.
Esperamos que estos consejos sean útiles y que podáis disfrutar de un viaje en avión sin problemas. Si tenéis más sugerencias, no duduéis en hacernoslas saber.