Catedral de Jaén: Gran patrimonio histórico y cultural

Tantas son las monumentales edificaciones dedicadas a la religión cristiana en nuestro país que no salimos del asombro al intentar presentaros algunos de ellos. En el día de hoy, hemos escogido a la Catedral de Jaén, sin mugar a dudas un edificio con historia y fuente de la cultura de España. Su fachada data de la época renacentista y en estos últimos meses se ha convertido en uno de los centros de interés más visitados de Jaén, por sus particularidades arquitectónicas y su valor simbólico y estético.

Por otra parte, en frente de esta maravillosa catedral se erige el Obispado y el Ayuntamiento, por una de los lados la Plaza Mayor, mientras que también se marca el comienzo del casco antiguo de la ciudad. Jaén posee un encanto propio que no lo tienen otras ciudades, probablemente ya conocéis esta localidad, pero os invitamos a redescubrirle en vuestras próximas vacaciones. Es ideal para ser transitada a pie, para poder ver con detalle cada una de las bellezas que tiene este lugar.

Además, en lo que respecta a lo paisajístico, una diversidad interesante se puede apreciar, siendo Jaén enmarcada por espectaculares sierras, cerros y peñas, por lo cual la propia ciudad registra desniveles y pendientes pronunciadas en sus calles. Es así que en una zona alta, sobresaliente en relación con otras edificaciones, se levanta la monumental catedral, señorial y de gran tamaño, a modo de castillo del siglo XVI.

Una de las principales características que ensalza a la Catedral de Jaén es su increíble luminosidad, la cual es propiamente de iglesias del Renacimiento europeo, que no solo hacía estas edificaciones altas para poder estar más cerca de Dios, sino que además se intentaba que ingrese por los enormes vitrales la luz divina. Lo que en sus comienzos era el panteón de canónigos, en la actualidad se ha convertido en un centro de exposiciones, es decir, que es un museo.

Otras de las iglesias más importantes se Jaén son las que se encuentran por los barrios de La Magdalena, la Merced y San Juan, que por supuesto llevan el mismo nombre, con enormes campanarios, lugares en los cuales antiguamente, antes de la reconquista, eran los clásicos Baños Árabes, abriéndose en los baj0os del palacio de Villardompardo, el cual actualmente es un museo de artes.

También es digno de ser mencionado el Museo de Jaén, el cual se encuentra muy cerca del monumento de las Batallas que se presenta como una forma de recordar las contiendas de Navas de Tolosa del año 1212 y de Bailén del año 1808 y cuenta con el mayor caudal de piezas del arte íbero español. Este lugar es ideal como una de las paradas para una larga caminata por todos los rincones de Jaén, una ciudad que propone un viaje no solo en el espacio, sino también en el tiempo, y se presenta como un destino perfecto para diferentes edades, así como para viajes en familia, para conocer uno de los lugares que más patrimonio cultural e histórico posee.

Es así que Jaén se convierte en una fusión de bellas sierras y demás bondades paisajísticas, a la vez que conserva intacto su espíritu religioso y cultural. Un lugar para descubrir y redescubrir cada vez que llegamos a él. ¿Qué os ha parecido la propuesta? Esperamos vuestros valiosos comentarios y que tengáis un excelente viaje.