Dentro del país asiático Nepal existen varias atracciones que merecen la pena ser visitadas en un viaje. Pero sin dudas, una de las más curiosas e interesantes es conocer de cerca la historia de la Diosa viviente Kumari. Esta diosa, que es un aún una pequeña niña, vive en el centro de Kathmandú.
Esta niña nepalí es adoradora como una diosa viviente. Es sumamente cuidada pues perderá su condición de deidad cuando sangre producto de alguna herida, o cuando llegue su menarca. Si deseáis conocer a la pequeña, debéis concurrir hasta su casa y esperar a que ella se asome a la ventana o salga a la calle.
Para llegar a ser la diosa viviente Kumari, esta niña fue seleccionada por un grupo de sacerdotes, que la hicieron atravesar por diferentes ritos, mientras vestían máscaras aterrorizantes. Kurami permaneció imperturbable sin mostrar temor alguno y ello se tomó como una confirmación de que es la reencarnación de la diosa Taleju.
La diosa vive con su familia, pero al mismo tiempo es adorada tanto por seguidores budistas e hiduístas. Es atendida por varios sirvientes y sacerdotes y asiste a algunas ceremonias y festivales callejeros donde también podéis aprovechar para divisarla entre las multitudes. Por otra parte, el concurrir a su hogar ofrece también la posibilidad de admirar una construcción típica de la arquitectura newarí. Es por ello, que es un paseo típico de Nepal y es ampliamente recomendado.
¿Vosotros concocéis este país? ¿os gustaría visitar Kathmandú? Esperamos vuestros comentarios.
1 comentario