Si tienes los cuatro días de vacaciones en Semana Santa, te proponemos que sean cuatro días de descanso y relax, para desconectarte del trabajo y las preocupaciones diarias.
Hoy hemos elegido una ciudad para que realices turismo urbano, sin prisa, con buenos alojamientos y excelentes paseos a pie. Tanto en tren, en coche o en avión puedes llegar a Sevilla, en pocas horas.
Sevilla es una ciudad llena de historia y de naranjos amargos, de flores, de música y de tapas. Cuenta con el nombre de «Muy Noble, Muy Leal, Muy Heroica, Invicta y Mariana Ciudad de Sevilla», una hermosura de verdad.
La gastronomía es excelente, con su toque principal de mucho aderezo, como la comida mediterránea, no complicada ni difícil de preparar. Te recomendamos no partir de esta ciudad, sin probar el gazpacho andaluz, la ensaladilla rusa, el salpicón y ensaladas varias. Si te gusta el pescado, lo preparan frito enharinado previamente, una delicia. Para el postre, elige los dulces típicos sevillanos: la torta de aceite, las tortas de polvorón, los pestiños, el alfajor, las yemas de San Leandro, el tocino del cielo y como no podían faltar para esta Semana Santa, las torrijas.
En paseos tienes un sinfín de oportunidades: el Archivo de Indias a la Torre del Oro, la Giralda, los Reales Alcázares o la Catedral de Santa María. No te olvides de visitar la basílica de La Macarena, el Hospital de los Venerables -en el barrio de Santa Cruz- o el palacio de San Telmo, construido en el XVII como universidad de Mareantes, después el Colegio de Marina hoy sede de la Junta de Andalucía, la casa de Pilatos construida en el siglo XVI
La Plaza de Toros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla es una de la más antigua de España. Puedes ver su programa en las carteleras exteriores o consultar en la Junta, que está abierta todo el día, sección turismo.
En Semana Santa se desarrolla un plan de seguridad especial, con lo vas a poder caminar por la ciudad sin miedos y vas a poder disfrutar de las procesiones, no te las pierdas.
Esperamos que disfrutes y nos cuentes a tu regreso ¿cómo te fue?