El monte Everest en China es conocido por ser el monte más alto del mundo y seguramente todos lo conocemos, ¿pero has oído hablar sobre el camino del Everest? Se trata de un pasaje absolutamente bello que sin lugar a dudas vale la pena conocer, si bien escalar el monte es sin duda una travesía que merece mención, lo cierto es que llegar hasta el lugar mismo es también merecedor de alabanzas. Hoy te contamos todo lo que debes hacer para disfrutar de este paseo y que puedas realizarlo en tu próximo viaje, ¡presta mucha atención!
Comenzamos partiendo desde Lhasa, se trata de la mística capital tibetana, el camino empieza en la cordillera del Himalaya, escoltada muy de cerca por otros cuatro picos muy prominentes (Lhotse, Makalu, Cho Oyu y Shisha Pangma), los mismos constituyen una colosal frontera natural entre Tíbet (China) y Nepal. Antes de llegar al Campamento Base del Everest debemos recorrer un camino muy largo y duro desde Lhasa. El camino que seguiremos se encuentra lleno de curvas, subidas y bajadas, son 600 kilómetros a los que hay que sumarle unos 100 más si te desvías para visitar Gyantse y el Lago Yamdrok.
Después de estos lugares seguramente pasaremos por Shigatse, y como último punto de interés antes del Monte Everest encontrarás el monasterio a más altura del mundo: el Monasterio Rongbuk, a 4.980 metros. Encontramos además el lago Yamdrok, este se sitúa a 100 kilómetros de Lhasa, tras superar el paso Kambala con sus 4.794 metros de altura, aquí podremos tomar fotografías fantásticas. Este lugar se encuentra a 4.441 metros de altitud y se trata de uno de los cuatro lagos sagrados de Tíbet, siendo habitual encontrarse peregrinos acudiendo a sus orillas. Este será el primer trecho de nuestro recorrido, aunque el camino aún sigue, no te pierdas la próxima nota en donde te contamos más, ¡no te arrepentirás de conocer el lugar en tus vacaciones!