Uno de los lugares más bellos de Italia sin duda es la ciudad de Turín, la cual cuenta con una doble ventaja, ya que al encontrarse bastante cerca, es ideal para realizar una escapada, por ejemplo por un fin de semana, y sin necesidad de gastar grandes fortunas, ni alojamiento ni en viajes. Esta localidad se encuentra hacia el noroeste de Italia, constituyéndose como capital de la provincia homónima, en la región del Piemonte. Como hermosa ciudad que es, existe un gran número de actividades por hacer, sitios por recorrer y lugares por conocer.
Uno de las paradas obligadas que debes hacer una vez que te encuentres en Turín es transitar por la Vía Po, donde podrás pasear desde la Piazza Castello a Piazza Vittorio Veneto, esta última es la que en Europa, dispone de la mayor porticada, así que no podéis perdérosla. En esta Vía además podéis apreciar buenas propuestas, principalmente para los amantes de lo dulce, ya que existen confiterías, heladerías y sitios donde comprar el mejor chocolate. Mejor aún en esta época del año cuando un delicioso helado es lo que la mayoría de nosotros desea tomar.
Por otra parte, como mencionábamos antes, está allí la Piazza Castello, ubicada en el centro de la ciudad, siendo la cual alberga al Palacio Madama y al Palacio Real. Aquí podéis ingresar, así como apreciar sus alrededores. Aunque sin duda lo más interesante es visitarlo por dentro, conocer sus salas y si ya lo conocéis, nunca está de más dar una recorrida por años de historia. También es una excelente idea echar un vistazo al Teatro Regio, que se encuentra muy cerca de esta Piazza.
También os recomendamos transitar por la Vía Roma, la cual es la encargada de funcionar como nexo entre el destino recién presentado con la Porta Nuova. Esta zona se caracteriza por ser bastante comercial, con locales totalmente exclusivos y muy interesantes para ser visitados. Sorprende el modo en el que están expuestas las diferentes vidrieras, además de que podrás estar al tanto de lo último de la moda italiana. Otra de las plazas que no puedes perderte es la Piazza San Carlo, probablemente una de las más bellas de Turín.
Finalmente, da una vuelta por los Murazzi, los cuales se presentan como antiguos almacenes, ubicados a los lados del Río Po. En la actualidad, estos almacenes se han convertido en unas estupendas tiendas de moda, destinadas principalmente al público más joven. Los días con mayor vida de los Murazzi son los martes y los fines de semana. Todos estos sitios son paradas obligadas, así que podéis ir anotándolos para no olvidarles. Gracias a su historia, belleza paisajística y punto en el que está ubicado, Turín es un excelente lugar para organizar un viaje corto. Es más, si estáis debiendo un regalo, por ejemplo del Día de la Madre que acaba de pasar, podéis invitarla a dar un paseo por esta ciudad y agasajarla con sus atractivos. Prueba con algunos de los chocolates o productos de confitería y veréis que no fallaréis.
¿Qué os ha parecido esta propuesta? Esperamos que os guste tanto como a nosotros. Dejad vuestros comentarios cuando queráis.