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Muchas veces, cuando por fin tenemos vacaciones, planeamos viajes al extranjero y es por ello que debemos saber con antelación algunos aspectos culturales importantes para no quedar allí como unos mal educados. Cada vez es más común viajar a destinos que hasta hace poco eran muy exóticos, principalmente hacia el lado de Oriente, zona en la que los códigos y señas adquieren vital relevancia en cuanto a lo que significan. Pero no solo allí, sino en cualquier país del mundo al que te dirijas y no manejes la lengua nativa, puede resultarte muy útil la enumeración que hoy te acercamos. Y es que te presentamos algunos de los gestos y aspectos del lenguaje corporal que pueden serte más que útil en tu próxima estadía en el extranjero.
Por ejemplo, si vas a Alemania y levantas tu pulgar en señal de afirmación o dando el ‘OK’ a algo, no estarás haciendo tal cosa, sino que solo estarás indicando el número 1, porque así comienzan a contar ello; mientras que en Japón, el 1 está indicado por el meñique, siendo el pulgar el número cinco. Es mejor que asientas con la cabeza o busques otra forma para afirmar o confirmar, porque esta será errónea.
Un error que no debes cometer si te trasladas a Grecia es mostrar la palma de tu mano. Este es un gesto de ofensa, un insulto imperdonable y más para una cultura como la griega. Si para ti esto indica que tu interlocutor tiene que hacer una pausa por algo en particular, para ellos es un agravio imperdonable, así que evita hacerlo. Según parece, este gesto se llama moutza y proviene de la antigüedad, cuando se solía arrojar excremento o cenizas a un agresor.
Por otra parte, si estás en Bélgica o en Francia, si recibes un golpe en la muñeca con los dedos de la otra mano, no pienses que te está pidiendo la hora. En realidad, lo que te está indicando en relación con el tiempo, es que es hora de que te retires del lugar. Si por otra parte, estás en Austria o Alemania en un bar y te invitan una copa, antes de sentarte en la mesa, los nativos suelen golpear dos veces la mesa con los nudillos, como forma de saludar a todos los presentes en ella.
Otras normas gestuales y protocolares, por ejemplo, son fundamentales al momento de ir a la casa de alguien que hayas conocido. Uno de los más comunes protocolos en Japón es descalazarse al ingresar a la casa. Lo mismo pasa en la zona de los países nórdicos, pero no tanto como norma de buena educación, sino para que no se llene de nieve del exterior, el interior del hogar. Lo más común, por ejemplo en Finlandia es llevar unas pantuflas para ir a la casa de alguien cercano.
En otros sitios, como ser Nueva Zelanda, si te invitan a una casa maorí, no solo debes dejar tu calzado afuera antes de ingresar al recinto, sino que además debes mostrar la planta de tus pies al anfitrión y siempre pisar descalzo el suelo. De este modo, los neozelandeses interpretan que respetas a los ancestros de los dueños de casa y serás casi un nuevo integrante de la familia.
Finalmente, en lo que respecta al brindis, un ritual muy común en todo el mundo, varía asombrosamente de un país a otro. Por ejemplo, alguien que se encuenta en Hungría jamás deberá entrechocar las copas, ya que esto está mal visto. Por otra parte, en Escandinavia o Inglaterra, cada persona que participe del brindis tiene que mirar al resto a los ojos. En China, en cambio, debes poner tu copa a menor altura que alguien que es mayor en edad que tú y debes beber todo el contenido del recipiente. En Bulgaria serás educado si dejas algo en la copa después de brindar.
Aquí ves cómo cambian los rituales de país en país, así como también tomamos conciencia de lo importante que es el lenguaje corporal y los gestos alrededor del mundo. Esperamos tus comentarios.