Destinos para una luna de miel (Parte 1)

Uno de los acontecimientos en la vida de los humanos es, sin lugar a dudas, el momento en que decide realizar su boda. Tan importante como la boda es el viaje de luna de miel y muchas parejas quieren visitar en esta instancia algún lugar paradisíaco, disfrutar de una playa en la cual poder estar reposado, tomando de un coco y debajo de la sombra de una palmera. Así, aprovechar las bondades de la naturaleza, por supuesto con la grata compañía de la pareja. Para todos los viajeros que en algún momento se plantearon este sueño loco, os ofrecemos cuatro destinos en los cuales podréis disfrutar de unas excelentes vacaciones de luna de miel.

Dentro de los cuatro destacados de hoy, se encuentran hermosas playas y son de las mejores islas tropicales que existen en el mundo. Si ya habéis ahorrado algunos euros para esa boda tan importante, debéis acompañarla con un buen viaje. Y más aún considerando que estos destinos son ideales para una escapada romántica, así que tomad nota.

En primer lugar, os presentamos al archipiélago de Kuna Yala, ubicado en frente a la costa de Panamá, en América Central. Este sitio también suele ser conocido como San Blas y es un territorio donde habita el pueblo indígena Kuna. Con una inmensa tranquilidad que hasta puede respirarse en el aire, este destino cuenta con grandes extensiones de blanquísima arena y algunas palmeras, contando además con algunas zonas en las cuales se pueden apreciar una serie de chozas, propias de los pobladores de Kuna.

Es tan satisfactorios tanto pasar el día en la playa y disfrutar de toda su belleza, o bien dar un paseo por las diferentes comunidades que se encuentran en los alrededores. Podéis combinar ambas cosas en vuestra estadía y así podréis ver a las mujeres con sus trajes tradicionales. Conoceréis una nueva cultura de personas que se muestran cálidas hacia los turistas, siempre y cuado se acerquen con respeto. Sin duda, una experiencia increíble y muy recomendable.

Por otra parte, os invitamos a conocer la isla Koh Tarutao, perteneciente a Tailandia. Cabe destacar que tiene una larga superfiecie de diez millas, a la orilla del mar Andaman, y cuenta con una diversidad paisajística digna de ser visitada. Esta rica tierra posee una gran extensión de selva donde se pueden encontrar diversos tipos de animales salvajes, así que a tener cuidado.

Además, esta isla tiene un gran caudal histórico, ya que sirvió de prisión, aunque actualmente se presenta como un parque nacional; por este motivo no existen allí ni grandes hoteles o resorts ni demasiados servicios y menos de lujo. Para el alojamiento hay en Koh Tarutao unas sencillas cabañas cercanas a la playa, cada uno de estos cuenta con su restaurante. Este lugar es ideal para unas vacaciones románticas, para poder alcanzar un mayor contacto con la naturaleza y la vida al estilo rústico.

Nos trasladamos ahora Ilha Grande, la cual pertenece a Brasil y es otra de las hermosas atracciones naturales que este país tiene para ofrecer. En un viaje romántico, podéis disfrutar de las playas, de la tranquilidad y sencillez del lugar, ideal para salir de la rutina y el estrés. En lo que respecta a lo gastonómico, disfruta de la pesca del día en los bellos y rústicos restaurantes que posee. En algún momento de vuestras vidas debéis conocer este lugar, es uno de los más bellos del mundo.

Finalmente, volvemos a América Central, pero esta vez a Belice, país que cuenta con un extenso territorio de playa, donde también se puede disfrutar del contacto con la naturaleza, además de alojaros en cabañas de madera muy atractivas e ideales para compartirlas en pareja.

Existen algunos sectores de las playas de Belice en los cuales se puede practicar buceo y conocer la más diversa naturaleza marítima del caribe. También podéis disfrutar de una placentera caminata por las orillas del mar Caribe, tomados de la mano y apreciando el atardecer, una escena muy romántica que vosotros podéis revivir.

Esperamos que os hayan gustado las propuestas ofrecidas. En unos días os traeremos más ideas para una luna de miel en algún paraíso terrenal.