Viajamos a Monschau

Hoy queremos hablar sobre un bello pueblo de Alemania en donde el tiempo se detuvo, se trata de esos lugares en donde aún se mantiene la estética del pasado y parece que estamos paseando por otra época. Estamos hablando sobre el pueblo Monschau, quizás hayas oído hablar de él. Hoy te contamos todo lo que necesitas saber sobre el mismo, de forma que lo visites en tu próximo viaje si tienes la oportunidad.

Comenzamos por ubicarnos más precisamente, este pueblo se esconde en el parque natural de Eifel, en el estrecho valle del río Rhur y pertenece al distrito de Aquisgrán en Renania del Norte-Westfalia. El mismo además se encuentra solamente a 2 kilómetros de la frontera con Bélgica, por lo que también será una excursión a tener en cuenta desde Bruselas. Una vez que entramos a este pueblo de ensueño nos encontramos con un paisaje de casas de ladrillo y madera a lo largo del río que serpentea entre árboles y arbustos. Esta es una de sus atracciones más placenteras, simplemente pasear por las estrechas calles empedradas, que nos trasladan a la Edad Media.

Para acompañar la imagen si vamos a la plaza del mercado nos encontraremos con un molino de agua y algunos paños de murallas y torres defensivas que aún se conservan. Además, encontramos en el centro a la Casa Roja, edificio barroco de siete plantas en el que hay instalado actualmente un museo.

Otra gran atracción de este lugar tiene que ver con la gastronomía, el pueblo es famoso por sus galletas Printen, que continúan haciéndose de forma artesanal en las muchas panaderías que podemos encontrar por todo el pueblo. Las mismas están preparadas con harina, huevos, azúcar, canela, anís y otras especias como el cardomomo. Otro elemento famoso de la gastronomía de este lugar es la tradicional mostaza que se fabrica desde hace más de un siglo en este lugar y que adereza las famosas salchichas alemanas. Además, si decides viajar en agosto entonces podrás disfrutar del festival de música clásica que se celebra cada año.

Por último, también recomendamos viajar en invierno, época en la cual el paisaje se transforma debido a la nieve, específicamente en Navidad el pueblo se ilumina y se llena de mercados. Aquí podremos comprar todo tipo de dulces y adornos para el hogar. Sin duda un viaje que vale la pena hacer, quizás puedas realizarlo en tus próximas vacaciones

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