Os proponemos un viaje a América del Sur, tan solo una semana, pero preparaos para moveros, disfrutar de hermosas playas, bailar, beber la más sabrosa cerveza y mucha mucha alegría y música.
La propuesta es visitar Brasil, especialmente Río de Janeiro la ciudad reina del Carnaval, en este año 2011 del 20 al 23 de febrero. Un viaje para probar todos vuestros sentidos, ya que la gastronomía es exótica y abundante, las mujeres guapas y fogosas, los hombres musculosos y seductores, los paisajes salvajes y naturales, los servicios excelentes con anfitriones dedicados al turismo hace cientos de años, una ciudad maravillosa hecha para disfrutar y divertiros.
Ahora os contaremos del acontecimiento que la paraliza: El Carnaval. El Carnaval de Río es uno de los eventos más importantes y sorprendentes, no hay carnaval en el mundo que se le compare, por su despliegue, trabajo y música.
Se desfilan en «escuelas de Samba», grupos de cientos de personas que se preparan todo el año, con un costo económico y físico enorme, para ir a un previo concurso y ganarlo para participar en el Carnaval, en febrero próximo.
Cada escola normalmente se une a un barrio de la ciudad o sus alrededores, y toman un tema para desarrollar con su música, sus atuendos, sus bailes, sus invitados especiales, sus alegorías, sus vestimentas, su carrozas, la magia de ese año estará representando ese tema.
Un poco de historia, para que vayáis preparando las valijas mientras:
Historia
El Carnaval cuenta sus orígenes en la antigua Roma, que tenía como objetivo festejar la llegada de la primavera. Posteriormente a esto hubo una extrapolación de estas costumbres a Europa renacentista y mediante el cruce del Atlántico llega a Sudamérica.
No penséis que solo en Brasil se festeja el Carnaval, también en otros países como Colombia, Ecuador, Argentina, Uruguay, entre otros. Todos ellos como el resultado de la conquista europea.
Una influencia aún más fuerte en la presencia del Carnaval en Brasil es a través de los esclavos. La influencia africana que se nota en la música, los vestuarios, entre otros, y también en las diferentes modalidades de festejo según la zona geográfica, por ejemplo, el Carnaval en Bahía del Salvador es muy diferente al de Río de Janeiro, eso os lo contaremos otro día. Prometido.
A através de Bahía entonces llega la Samba a Río, siendo esta de origen Angol, más precisamente parte de la religión yoruba. Estos bailes que antaño sirvieron a los esclavos como una forma para sobrevivir, como expresión, ahora son la memoria histórica del pueblo brasilero.
Los cuatro días que se festeja el Carnaval de Río, la ciudad se viste de fiesta, alegría y nadie trabaja, se tiene libre, para realizar otras tareas, participar en las escolas o simplemente disfrutar de la alegría. Esto hace que sea unos de los hechos sociales más importantes del planeta, la unión de todas las clases sociales por un motivo de alegría y festejo, una cultura que entra de pequeño en los niños y no se va nunca.
El Carnaval da su inicio en el Sambódromo Marques de Sapucaí, en donde se da apertura a la celebración a través de la coronación del Rey Momo, por parte del alcalde, el cual le entrega las llaves de la ciudad. En este mismo día se da el desfile de las escuelas infantiles.
Al segundo día ya es oficial el Carnaval. En este día podemos encontrar diferentes opciones.El principal evento será el desfile en el Sambódromo, o un sinnúmero de fiestas callejeras y privadas para todos los gustos. Siempre con tu disfraz o alegoría puesta y la alegría de la música sin parar.
El tercer día veremos el desfile de las escola del grupo Especial. Entonces, un espectáculo de belleza inundará la larga avenida del Sambódromo. Las luces, los colores, las guapísimas «meninas», ya con sus esbeltos cuerpos pintados, pues ya ahorran tela para los disfraces (jaja), los espectaculares vestidos de los «destaques», las plumas, sedas, perlas, pieles, telas de todos colores, el baile, los aromas a perfumes de arco-iris y las bellas carrozas que nos transportarán en un viaje artístico, con raíces históricas.
Finalmente, el último día traerá el desfile de las escolas de Samba del grupo B. Será un día especial porque sabremos cuál será el ganador del concurso, entre todas las escolas do Samba que desfilaron. Con un cierre especial, y alguna fiesta privada que embellezca nuestra última noche y nos dé el romanticismo del glamour de los disfraces y la caipirinha (bebida típica).
Millones de personas giran en este festejo, el mayor del país, y de esta maravillosa ciudad, que baila de noche y duerme de día, por cuatro días consecutivos. Donde se consumen miles y miles de litros de bebidas, todo tipo de comidas, salidas de todos los rincones de la ciudad, y explotan los lujosos hoteles de turistas de todos el mundo.
Se descubre ese ritmo, que ya es sanguíneo, del brasilero por la música, la Samba, y no podremos regresar sin aprender a bailarla, y sin dejar de tararearle. Nos traeremos muchas» piñas coladas» bebidas dentro del mismo coco, sobre la arena blanca de la playa principal Copacabana y «ciegos» de las guapísimas brasileras, doradas por el sol por naturaleza, con dientes blancos y sonrisa fácil, simpatía y servicio como profesión.
Además es importante destacar que el Carnaval de Brasil, no gira en torno a ideas banales, sino que juega un papel de gran envergadura, porque el Carnaval mantiene viva la tradición, es un recurso para traer y compartir la memoria histórica del país y hacerlo desde un enfoque artístico y cultural.
Así que ya habéis terminado vuestras valijas, ¿no? solo falta la bikini y el bañador, ya que la oportunidad de venir a Río de Janeiro es ésta, venir al Carnaval de Río, la próxima escapada.
¿Ya habéis visita Río en Carnaval? ¿Vosotros pensáis que todos los carnavales son iguales? ¿nos cuentas vuestro viaje?
nada más hermoso y contagioso para divertirse que el carnaval de rio, no se lo pierdan, por favor que se pueda hacer con tanto lios que hay en seguridad, droga maldita!!!!!!!!!!!!! felicitaciones por el post está excelente!!!!!!!!!!!!!!!