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Ya hemos hablando de Copenhague en varias ocasiones, la capital de Dinamarca. Vimos sus platos típicos y algunos de los mejores lugares en donde alojarse, sin embargo, hasta el momento no mencionamos sus atracciones turísticas. Por eso, hoy vamos a centrarnos en uno de los mejores recorridos para realizar en Copenhague, te proponemos una guía de sus castillos románticos. ¡Un paseo inolvidable!
Para comenzar, si es tu primera vez en viajar a este país te contamos algunos de los elementos básicos que debes conocer, como por ejemplo, el idioma. En Copenhague se habla danés e ingles, siendo el segundo más común. Por otro lado, tiene un clima oceánico templado, por lo que en la noche refresca bastante. La ciudad está situada sobre la costa este de Selandia y está repleta de túneles y puentes que la unen con otros barrios.
La ciudad de Copenhague tiene un encanto muy especial, ya que está rodeada de edificaciones históricas, preciosas plazas, callejas empedradas y un gran número de palacios y castillos antiguos. A continuación te mencionamos los principales, aquellos que no puedes dejar de visitar:
– Amalienborg, es un palacio y jardín, este era la residencia de invierno de la familia real danesa. Si te interesa el aspecto artístico de este tipo de edificaciones te contamos que tiene un estilo rococó. También podemos pasar de camino por Amaliehaven, un pequeño jardín con una bella fuente que se encuentra entre el palacio y el puerto.
– Castillo Rosenborg y el Jardín del Rey, es un palacio real en donde se encuentran las joyas reales de la familia. Este lugar tiene un gran contenido histórico, fue construido por el rey Cristian IV en 1606, aunque originalmente tenía menos edificios, a lo largo de los años fueron sumándosele más. A su alrededor, además, está el Jardín del Rey, un parque gigante lleno de esculturas y rosas, especial para visitar durante el verano.
– Palacio Fredensborg, se encuentra más al norte de la ciudad y es en donde se vivió una de las más populares historias de amor danesas, entre el príncipe Frederik y su esposa, quien era una chica común que terminó siendo princesa. Su jardín se guía bajo un estilo barroco y es uno de los mejores conservados.
– Palacio Frederiksberg, el cual abre al público solamente una vez al mes, el mismo es una verdadera obra maestra, con paisajes de gran belleza y un destino muy popular durante el verano.
– Castillo Frederiksberg, también al norte de la ciudad aunque en este caso tiene un estilo renacentista. Dentro del mismo se encuentra el Museo de Historia Nacional Danesa, además, está a orillas de un lago y por supuesto, posee jardines muy hermosos.
– Castillo Kronborg, otro castillo renacentista que tiene como principal atracción sus cañones y paisaje que mira al mar, además de túneles subterráneos.
Todos son lugares muy recomendables para visitar, lo ideal es planificar un tour y en uno o dos días hacer un paseo por todos ellos. ¿Qué piensas? ¡Una buena idea para las vacaciones!