1.Piensa en el tiempo que tienes libre. Si sólo tienes cinco días hacer un viaje que te exija el esfuerzo físico y económico que requiere un viaje trasatlántico puede que no sea adecuado. Por otro lado salvo que seas una persona extremadamente tranquila quizá te puedas desesperar si te vas de vacaciones 30 días a San Marino ( un pequeño país en mitad de Italia).
2.Decide las personas con las que puedes ir al viaje.
No es lo mismo irte de viaje con una persona acostumbrada a recorrer el mundo, que irte de viaje con alguien que no ha pasado más de 3 días separado de su mamá.
Uno de los elementos más importantes para que haya armonía en el viaje es que haya un acuerdo en la orientación del viaje. Si tú quieres ir a Italia para ver los archivos vaticanos y tu amigo sólo quiere conocer la noche de Roma, habréis de pensar si sois capaces de lograr un equilibrio o si sería mejor buscar otro compañero de viaje.
Otra recomendación: no retrases mucho tiempo la formalización de tu viaje por un amigo que “no sabe si irá”. En la gran mayoría de los casos son personas que no pueden viajar, o no quieren hacerlo o no lo quieren hacer contigo. Y si por un milagro deciden al final ir, siempre habrá forma de acomodarlas.
3.Decide el lugar que quieres visitar considerando:
a) la seguridad ( o falta de seguridad )del país. Puede que Mesopotamia sea la cuna de la civilización, pero ir de vacaciones a Irak puede hacerte quedar como un valiente delante de tus amigos, pero plantearte un problema muy grande una vez que estés allí. En caso de duda, opta por la seguridad.
b) si se exige en el país algún tipo de vacuna para la visita. Quizá no se necesite vacuna pero sí exista un grave riesgo para la salud que implique la necesidad de tomar ciertas precauciones.
c) si es el momento climatológicamente más adecuado para visitar ese país. Puede que tu ilusión de siempre haya sido conocer Rusia, pero si tienes vacaciones en febrero quizá no es el momento adecuado para ir. La climatología y las diversas épocas turísticas pueden convertir tu viaje en un infierno si no tienes esos factores en cuenta.
d) si requiere algún tipo de visado o autorización de entrada. Posiblemente puedas descubrir eso en lonelyplanet.es entre otras páginas ( si sabes inglés anímate a ir a la versión .com y lee los interesantísimos consejos de los viajeros en the thorn three). Hay visados que son simplemente una manera encubierta de cobrarte una cantidad de dinero y no plantean grandes problemas. Pero hay otros visados que requieren que entregues documentos en la embajada y luego los vayas a recoger otro día. Eso supone un gran gasto y una enorme molestia ( aún recuerdo la pesadilla del visado para China). Si necesitas ese tipo de visado considera que será necesario que planifiques con mucha antelación.
4. Comprueba que tu pasaporte esté en vigor durante todo el tiempo exigido en el país de destino ( normalmente hasta 6 meses después de la entrada) y, que la foto sea visible (recuerdo un problema en Estados Unidos con una foto borrosa) . Al menos has de llevar una fotocopia del pasaporte en un lugar distinto al del pasaporte pues si lo perdieras eso puede que le facilite a la embajada la expedición de otra copia.
5.En cuanto al tema del seguro de viaje, siempre es recomendable, aunque he de confesar que yo nunca lo he contratado. Pero muchas personas que viajan frecuentemente me lo han recomendado, y no parece que su contratación sea demasiado cara.
6.Avisa a algunos de tus parientes más próximos de que te vas y de dónde vas a estar. Sin embargo por razones de seguridad no soy nada partidario de hacer comentarios en alta voz que puedan oir personas desconocidas en tu vecindad, ni tampoco de hacer referencias en redes sociales al tiempo que vas a estar fuera.
7.Si el país es muy peligroso puede que tenga ventajas hacer un viaje organizado. Si no siempre te saldrá mejor viajar por tu cuenta. A cada uno le gustan unas cosas. Desde que una vez en un viaje a Jordania tuve que abandonar la representación de como maniobraba el ejército romano para tirarme 30 minutos perdido en una cafeteria nunca más he vuelto a ir en viaje organizado.
8.Cómo mínimo deberías tener contratado el viaje de ida y de vuelta al destino y la primera noche de hotel. A mí me gusta viajar sin saber exactamente donde voy a ir. Eso me permite además ir modificando el viaje en función del interés que vaya teniendo en los lugares que visito. Si no tienes contratadas todas las noches de hotel, es conveniente que el hotel de la primera noche y todos los que vayas cogiendo tengan wi-fi para ir cogiendo los hoteles por internet ( mucho más barato y más cómodo que simplemente entrando en el hotel).
9.Si has de volver desde una ciudad, déjate como mínimo el último día para visitarla. Llegar a una ciudad el mismo día en que has de coger el vuelo sólo puede llevarte a que tengas problemas en cuanto haya un atasco o cualquier complicación.
10.Si te preocupa la seguridad puedes pedir a un vecino que recoja las cartas que sobresalgan de tu buzón ( que siempre son un indicador bastante evidente de que no estás) e incluso te recomendaría usar un programador ( que puedes comprar por pocos euros en cualquier tienda de productos electrónicos para el hogar) para conseguir que una lámpara visible desde fuera se ilumine en determinadas franjas horarias. Así dará la sensación de que hay alguien en casa.